Berenjena

Es una solanácea. Solanum melongena L. es una planta plurianual, pero que generalmente se cultiva como anual, de crecimiento lento e indeterminado, pudiendo llegar en condiciones ideales de cultivo a una altura de 2-2,5 m (incluso a los 4 m, en invernadero). Su sistema radicular es muy potente, desarrollado y profundo. El tallo es erecto o rígido, espinoso, ramificado y lignificado. Las hojas son de gran tamaño, con bordes lobulados de textura aterciopelada, vellosas (pubescentes) en el envés y en algunos cultivares presenta espinas en el nervio central. Las flores son hermafroditas, con estambres amarillos y corola violeta más o menos intenso, incluso blanca en aquellas que dan frutos de color blanco. El fruto es una baya carnosa de diversas formas (cilíndrica, ovoide, casi esférica) y colores (violeta, negro, morado, blanco, blanco jaspeado) según variedades.

La berenjena es amante de la luz, pero exigente en temperatura: nocturnas 18-22 ºC y diurnas 22-26 ºC. Se ve afectada por las heladas con temperatura inferior a 0 ºC, pero es resistente a temperaturas elevadas (máxima biológica de 45 ºC).

Como el resto de verduras y hortalizas, tiene un valor energético y proteico bajo, siendo el agua el elemento mayoritario. El aporte de sales se lo debe al potasio, el mineral más abundante, y en su composición se contabilizan cantidades discretas de fósforo, calcio, magnesio y hierro. En cuanto a su carga vitamínica, sobre todo folatos y vitamina C, no resulta significativa en comparación con el resto de hortalizas.

CALENDARIO DE PRODUCCIÓN: de Octubre a Junio.